¿AMOR? ¡LOS COJONES, AMOR!
SINOPSIS
En más de una ocasión
hemos escuchado eso de “te querré siempre”, “te quiero hasta el infinito” o
“eres el hombre de mi vida”. Cosas de amor y todo eso, claro. Y, al principio,
“siempre” es siempre, el “infinito” es el infinito y lo de la vida, pues eso
mismo.
Al principio.
El amor es lo que tiene.
Nubes de algodón de azúcar, unicornios de color rosa, princesas y princesos,
presiosas y presiosos… todo eso.
Luego resulta que aquel
“siempre” dura tres o cuatro meses a lo sumo, el “infinito” está ahí a la
vuelta de la esquina y aquella tiene más vidas que un gato. Y resulta también
que el algodón de azúcar se acaba y queda solo el palo, los unicornios de color
rosa se convierten en jumentos que hacen boñigas del tamaño de balones de
reglamento y las princesas y los princesos cagan y mean lo mismo que el vecino
ese tan feo, les huelen los pies y hasta el bonito lunar junto al labio se
convierte en verruga.
Y aparecen el “amigo
babas” y el “cantarico nuevo”. Y se escuchan frases como “necesito espacio” o,
en el colmo de la perversión, “pero podemos seguir siendo amigos”.
Sí, sí. Cosas del amor y
todo eso.
El amor sí.
¿Amor? ¡Los cojones, amor!